Hablar con nuestra simbología y en nuestros códigos es la actual de táctica discursiva de la extrema derecha. Hablar desde adentro, para desmoralizar. Ellos se dieron cuenta que su mensaje no llegaba a sectores chavistas, porque utilizaban interlocutores que representaban a los partidos de extrema derecha.
Ese emisor era rechazado, por lo que modificaron su táctica. Ahora, la ultraderecha usa a portales como Aporrea, junto con células izquierdosas, que emiten mensajes no para desestabilizar (rol que cumple El Nacional, Tal Cual, etc.), sino para desmotivar y/o desmoralizar.
Escrito por Arlenin Aguillón
@arleninaguillon